Toyota traza su ambiciosa ruta hacia la excelencia en la movilidad eléctrica con la introducción de baterías de estado sólido proyectadas para el año 2028. Esta innovación catapultará la autonomía de sus vehículos a impresionantes 1.200 kilómetros por carga. Sin embargo, este hito revolucionario estará reservado inicialmente para unos pocos afortunados, ya que la producción será limitada durante los primeros años.
La visión de Toyota de lograr que sus autos alcancen los 1.200 kilómetros con una sola carga ha sido una promesa constante. Este avance se materializará con baterías de estado sólido, pero lamentablemente solo unos miles de vehículos eléctricos en todo el mundo podrán disfrutar de estas prestaciones a partir de 2028.
Mientras tanto, la marca japonesa continuará evolucionando las baterías de iones de litio de base líquida, que podrán ofrecer una impresionante autonomía de 800 kilómetros para el año 2026. Un avance significativo en comparación con las cifras actuales.
En el mismo año, Toyota lanzará autos con batería de litio-ferrofosfato, ofreciendo una opción más asequible con una autonomía de 600 kilómetros por carga completa. Doce meses después, se sumará una variante de tipo bipolar, prometiendo una autonomía de 1.000 kilómetros con cada recarga.
Este enfoque gradual se alinea con la estrategia de Toyota de adoptar los vehículos eléctricos de manera más pausada en comparación con otros fabricantes. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la asociación con Idemitsu, la empresa petroquímica clave, limitará la producción inicial de electrolito sólido para apenas 10.000 vehículos en la primera avanzadilla de 2028.
Esta cifra, aunque significativa, resulta diminuta en comparación con la producción mundial de Toyota. En otras palabras, los afortunados conductores que experimentarán la comodidad de una autonomía superior a los 1.200 kilómetros con recargas de apenas diez minutos serán una exclusiva minoría.
No obstante, para el año 2030, Toyota tiene la mira puesta en la posibilidad de iniciar la producción masiva de esta tecnología, marcando un hito hacia un futuro de movilidad eléctrica aún más accesible para todos.
