El Chevrolet Tracker LTZ, un B-SUV fabricado localmente, ha retomado su liderazgo en el segmento gracias a su diseño atractivo, equipamiento de calidad y una mecánica confiable. Analicemos qué ofrece este modelo y cómo se desempeña en diversos aspectos.
Diseño Exterior e Interior
La estética del Chevrolet Tracker LTZ sigue siendo contemporánea y atractiva, manteniendo su atractivo desde su lanzamiento en 2020. En el interior, encontramos materiales de calidad, con tapizados en tela y cuero ecológico, y detalles en plásticos suaves. El equipamiento de confort incluye aire acondicionado, sensores de estacionamiento, cámara de retroceso y conectividad avanzada con pantalla táctil de 8″ compatible con Android Auto y Apple CarPlay.
Chevrolet Tracker en Desempeño y Mecánica
Desde 2020, el Tracker LTZ cuenta con un motor turbo de 3 cilindros y 1.2 L que produce 132 CV a 5500 rpm y 19,4 kgm de par a 2000 rpm. Está asociado a una transmisión automática de 6 cambios y tracción delantera. Este conjunto mecánico ofrece una buena potencia y torque adecuados para ciudad y viajes, con un enfoque en eficiencia y rendimiento.
La dirección progresiva y las suspensiones bien ajustadas hacen que sea placentero de manejar, absorbiendo bien las irregularidades del camino y proporcionando un despeje suficiente para sortear obstáculos sin problemas.
Seguridad y Tecnología
En términos de seguridad, el Tracker LTZ cuenta con seis airbags, controles de estabilidad y tracción, frenos ABS y EBD, anclajes Isofix, monitor de punto ciego y frenado autónomo de emergencia. Si bien no incluye todas las asistencias avanzadas a la conducción (ADAS), obtuvo la máxima calificación de cinco estrellas en las pruebas Latin NCAP para adultos y niños.
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