El cuencano Tomás Saldaña se convierte en la revelación al ganar un título nacional en su debut como piloto, liderando la categoría UTV-T en la edición 44 de la Vuelta a la República. Junto a su copiloto Cristian Cordero, los representantes azuayos lograron un tiempo impresionante de seis horas, 57 minutos y 39 segundos.
Para Saldaña, este triunfo es más que un logro deportivo; es la realización de un sueño postergado que tenía la intención de compartir con su padre, Hernán Saldaña (+), hace algunos años.
El acercamiento de Tomás al automovilismo se produjo hace apenas dos meses, cuando adquirió su vehículo de competencia y se sumergió en el mundo tuerca. Motivado por su amigo y campeón nacional, Juan Guerrero, Saldaña no solo cumplió su meta de terminar la Vuelta, sino que la ganó. “Es una experiencia inexplicable”, comparte emocionado.
Con el Tem 933, Saldaña se integró rápidamente al equipo, siendo clave la participación de su experimentado copiloto, Cristian Cordero, recomendado por Juan Guerrero. La confianza en el equipo se reflejó en el primer lugar.
Aunque el objetivo inicial de Tomás era completar la Vuelta a la República, las circunstancias cambiaron en el último tramo cronometrado, donde aprovecharon la avería del líder para tomar la ventaja. En el mundo del rally, como le enseñó Juan Guerrero, hasta que la bandera no se baja, la carrera no acaba.
“Esto me dijo Juan Guerrero. Sus consejos sirvieron y a la vez estoy feliz por su victoria. Junto a Cristian se hizo un equipo completo y estoy feliz por haber compartido con este copiloto. La verdad son experiencias que quedan para siempre. Antes disfrutábamos como espectadores, pero ahora fue diferente”.
