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Quito impulsa un nuevo modelo de movilidad sostenible

La incorporación de taxis eléctricos en Quito marca un nuevo avance en la transición hacia un sistema de transporte urbano más eficiente y menos contaminante. Actualmente existen 41 marcas de vehículos eléctricos en el mercado ecuatoriano, y todas compiten por posicionarse en un entorno que demanda innovaciones sostenibles. Aunque otras ciudades del país dieron pasos previos, la capital se consolida como el mercado más dinámico y abierto a la movilidad eléctrica.

Lanzamiento de la primera flota eléctrica para el taxismo

El 2 de diciembre de 2025 se oficializó un hito importante. Un acuerdo entre GAC Ecuador y la operadora Fastline permitió poner en marcha la primera flota de taxis eléctricos en Quito. En esta fase inicial se entregaron 12 unidades del sedán AION ES, un modelo de la fabricante china Guangzhou Automobile Group (GAC). Estas unidades fueron asignadas a los socios de Fastline, quienes ahora integran un sistema moderno orientado a reducir emisiones y mejorar la experiencia de transporte.

Este proyecto amplía la transición hacia vehículos limpios, iniciada en ciudades como Loja y Guayaquil. Loja introdujo la primera flota en 2017, con 37 unidades de BYD. Guayaquil replicó la iniciativa con políticas que facilitaron la adopción del modelo. Ambas ciudades demostraron que el uso diario de taxis eléctricos resulta viable y confiable.

Experiencias previas y beneficios operativos

Jorge Burbano, gerente general de BYD en Ecuador, señala que Loja y Guayaquil han impulsado políticas favorables que fortalecieron el uso de taxis eléctricos. Además, recalca que estos modelos operan sin inconvenientes durante toda la jornada laboral. Esto significa que los conductores no enfrentan riesgos de quedarse sin carga durante sus turnos, lo cual mejora la confianza en esta tecnología.

Taxis eléctricos en Quito operando como nueva flota sostenible

Retos y necesidad de infraestructura

Aunque la adopción de taxis eléctricos en Quito representa un avance, el país aún enfrenta desafíos importantes. Entre ellos destaca la necesidad de ampliar la red de electrolineras. Sin una infraestructura sólida, el crecimiento de la movilidad eléctrica podría limitarse. Por ello, se espera mayor inversión que permita cubrir la demanda creciente y garantizar un sistema sostenible, seguro y funcional.

Un paso decisivo hacia la movilidad sostenible

La llegada de taxis eléctricos en Quito evidencia un compromiso creciente con la innovación ecológica. El impulso de diferentes ciudades demuestra que el país avanza hacia un modelo de transporte responsable. Con una infraestructura adecuada, esta tendencia podría consolidarse como un cambio estructural para mejorar la calidad del aire y reducir los costos operativos del transporte urbano.

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FUENTE:
larepublica.ec