Aunque la industria automotriz parece enfocarse en el desarrollo del coche eléctrico, aún hay marcas que creen en el potencial del motor de combustión interna con emisiones reducidas. Renault es un claro ejemplo de esto. En lugar de apostar por el hidrógeno, la marca francesa ha optado por continuar innovando en el motor de combustión interna diésel, pero con una gran reducción de emisiones.
Una alianza estratégica para un motor innovador
La división Horse de Renault, encargada de desarrollar motores de combustión interna, ha firmado un acuerdo con Dumarey, un proveedor italiano especializado en movilidad sostenible. Este acuerdo tiene como finalidad la creación de un nuevo motor de combustión interna que utilice diésel, pero con muy bajas emisiones. Renault y Dumarey combinan su experiencia para ofrecer una solución que cumpla con las estrictas normativas de emisiones, como Euro 6 y Euro 7.
Especificaciones del motor: bajas emisiones, gran rendimiento
El motor diseñado por Horse y Dumarey será de cuatro cilindros y dos litros de cubicaje. Esta máquina, que promete ser la insignia de Renault en la próxima generación de vehículos, estará disponible tanto en versiones con transmisión automática como manual. Lo más destacado es que, aunque sigue utilizando diésel, sus emisiones de gases de efecto invernadero serán muy bajas, lo que contribuye a la reducción de la huella de carbono en la movilidad.
Un futuro más allá del diésel
Este acuerdo entre Renault y Dumarey no se limita únicamente a motores diésel. La colaboración establece las bases para futuros proyectos relacionados con el desarrollo de motores que utilicen combustibles alternativos, como hidrógeno o biocombustibles. Aunque en esta ocasión no se mencionan tecnologías híbridas o eléctricas, la experiencia de Dumarey en el sector de pilas de hidrógeno podría ser clave para futuras innovaciones.
La realidad de la movilidad eléctrica
Si bien el coche eléctrico está en auge, la evolución de esta tecnología ha sido más lenta de lo previsto, con ventas que no terminan de despegar. Este escenario sugiere que el motor de combustión interna aún tiene una larga vida por delante antes de ser reemplazado completamente. Renault y Dumarey parecen conscientes de ello y continúan ofreciendo soluciones sostenibles para el presente, mientras miran al futuro con motores de bajas emisiones.
Fuente:
www.ecoticias.com
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