Coches eléctricos sin apoyo de Mitsubishi ni Nissan
Renault ha recibido un duro golpe con la retirada simultánea de Mitsubishi y Nissan de su división dedicada a los coches eléctricos, Ampere. Aunque inicialmente ambas marcas japonesas se comprometieron a invertir 800 millones de euros, han decidido retirar su respaldo en un momento clave del desarrollo tecnológico. Esta decisión deja a Renault sin el soporte económico esperado, pero no sin determinación para avanzar.
El impacto en la estrategia Renaulution
El plan Renaulution, que segmentó el negocio de Renault en unidades especializadas como Alpine, Mobilize y Ampere, tenía como objetivo acelerar la transición hacia la electromovilidad. La retirada japonesa representa un obstáculo relevante para los coches eléctricos, aunque Renault asegura que Ampere sigue generando flujo de efectivo suficiente para sostener sus operaciones. Aun así, la pérdida de confianza de sus aliados representa una señal preocupante.
Coches eléctricos y la apuesta independiente de Renault
Pese al revés, Renault insiste en que seguirá adelante con su hoja de ruta. El éxito inicial del nuevo Renault 5 —el coche eléctrico más vendido en varios países europeos el pasado abril— fortalece su postura. Este modelo, símbolo del compromiso con la electrificación, refleja la viabilidad del proyecto, al menos en el corto plazo.

¿Qué significa esto para el futuro de la alianza?
La alianza entre Renault, Nissan y Mitsubishi sigue activa, pero se ha debilitado. Las colaboraciones seguirán existiendo, especialmente en modelos compartidos como el Clio y el Colt. Sin embargo, la independencia financiera en los coches eléctricos plantea nuevas dinámicas. Nissan, por ejemplo, también enfrenta una crisis que la obliga a tomar decisiones drásticas, como recortes de personal y posible reestructuración.
Un camino incierto pero sin vuelta atrás
Renault ha dejado claro que no dará marcha atrás. Aunque la salida de sus socios japoneses dificulta el camino, la electrificación no se detiene. Coches eléctricos como el Renault Scenic o el Symbioz seguirán en la agenda. La automotriz francesa está dispuesta a liderar por su cuenta, confiando en su capacidad de innovación y en el respaldo de un mercado europeo cada vez más favorable a la movilidad eléctrica.
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